Estilo crol

ESTILO CROL

-Introducción: 
El crol es un estilo relativamente fácil, tanto de aprender como de realizar. También es económico en cuanto a resistencia se refiere.

Los nadadores utilizan una acción de brazos alternativo y un batido de pies alternativo.
En relación a los brazos; mientras uno de ellos se mueve hacia adelante por el aire, con la mano dispuesta a entrar en el agua y con el codo relajado, el otro brazo se mueve avanzando bajo el agua en sentido contrario al otro brazo.
En cuanto a las piernas; el movimiento de estas, también llamado patada oscilante; consiste en e un movimiento alternativo de las piernas que parte de la cadera, en un movimiento de arriba a abajo con las piernas relajadas, los pies hacia dentro y los dedos de punta.

En este caso, un ciclo se compone de una acción completa de brazo derecho, una completa de brazo izquierdo y un número variable de batidos en las piernas.

La respiración es algo muy importante y de lo que hay que tomar conciencia en todos los estilos. Concretamente, en el estilo crol se inhala aire por la boca al girar la cabeza hacia un lado y se exhala dicho aire debajo del agua. De esta manera, cuando giramos la cabeza nuevamente, podemos volver a coger aire.
Lo más recomendable es aprender a respirar por los dos lados, cada 3 o cada 5, para que no se produzcan descompensaciones en la columna.


-Acción de piernas:
La acción más propulsora de este estilo es aquella realizada por los brazos, sin embargo, el consumo de energía en el batido de piernas es mucho mayor.
La acción de las piernas consiste en alternar diagonalmente el barrido de las mismas. Este movimiento está provocado por la acción de la rotación longitudinal de las caderas, es decir, las piernas realizan un movimiento ascendente y descendente mezclado con un movimiento adentro afuera. 

El batido de las piernas parte de las caderas y seguidamente, las rodillas marcan la guía en cada dirección.


En la fase ascendente del batido, la pierna se dirige hacia la superficie de forma totalmente extendida con los pies en extensión plantar. Una vez la planta del pie alcanza la superficie, la rodilla se flexiona y empieza la fase descendente.
Sin embargo, el movimiento de las piernas no es solo ascendente y descendiente sino que además se desplazan en diagonal; ayudando así a la rotación del cuerpo y a la estabilidad.


-Coordinación pies-brazos:
Para mantener la fuerza propulsora en nuestro nado se debe hacer una buena coordinación con la respiración y con el movimiento de brazos.
Existen dos formas de coordinación de pies y brazos: el crol de 6 tiempos (más utilizado por los nadadores de velocidad), el de 4 tiempos o el de 2 tiempos (más utilizado por los nadadores de fondo).


-Posición de los pies:
En cuanto a los pies, sin salir del agua, estos deberán permanecer en extensión, sueltos y relajados, consiguiendo así una buena flexión de los tobillos.

Las puntas de los pies se mantienen ligeramente hacia dentro y próximos mientras los talones permanecen separados.

La rodilla se flexiona al comenzar el batido hacia abajo.


 -Fases de la brazada en crol:
La brazada en crol consta de dos fases principales: la tracción y el recobro.
A su vez, la tracción se divide en otras cuatro partes: la entrada, el agarre, el tirón y el empuje. 

En el momento en el que la mano entra en el agua haciendo la tracción, se dibuja una "S" más o menos perfecta. Inmediatamente después, el brazo se extiende hacia delante efectuando la entrada y la extensión, el movimiento sigue la trayectoria hacia fuera y abajo realizando la fase descendente y el agarre y según mueve la pierna, cambia hacia dentro; lo que da lugar al barrido hacia dentro.
Finalmente, el brazo sale hacia fuera, arriba y atrás, dando lugar a la fase ascendente y tras eso, el brazo sale fuera del agua para realizar el recobro.  

-Posición del cuerpo:  
Una buena posición del cuerpo se basa en la alienación horizontal, la alienación lateral y el giro del cuerpo.

• La alienación horizontal del cuerpo: consiste en una posición horizontal o plana que nos permita mover los pies de una forma efectiva a una cierta profundidad en el agua generando así menos resistencia contra esta.            Dejar hundir los pies o levantar demasiado la cabeza y los hombros hace que aumente la resistencia al avance.

• La alienación lateral del cuerpo: son las fluctuaciones que hace nuestro cuerpo como consecuencia del movimiento alternativo de los brazos. Este movimiento hace que aumente la resistencia del agua por lo que se pretende conseguir la mejor alienación lateral posible.

• Giro del cuerpo: este movimiento facilita tanto la tracción como la recuperación de los brazos. Se considera que el giro de rotación debe de ser de al menos 45 grados sobre cada lado, aunque generalmente, los nadadores giran más hacia el lado que respiran.  

-La coordinación: En este caso podemos distinguir 2 partes; la tracción o parte acuática y el recobro y la parte aérea. 

 Dentro de las dos partes, existen tres tipos de versiones en este estilo:

• Ángulo de 90 grados: cuando un brazo entra el otro brazo se encuentra en la mitad del recorrido.
• Ángulo de 45 grados: antes de que el brazo del tirón alcance la posición adecuada, es decir, antes de que llegue a conseguir el ángulo de 90 grados.
• Otro tipo de ángulo: en este caso, nunca se completa el ángulo de 90 grados ya que cuando un brazo entra, el contrario ya ha pasado por el punto medio de la tracción.

-La respiración: Muchos podrían pensar que lo más lógico sería tomar aire por la nariz y soltarlo por la boca, pero si lo hacemos así, no conseguiríamos coger el suficiente oxígeno y muy pronto aparecería la fatiga.
Debemos tomar el aire por la boca, evidentemente fuera del agua, ya que tenemos menos tiempo para hacerlo y necesitamos cargar los pulmones. Por lo contrario, expulsamos dicho aire por la nariz dentro del agua ya que en este momento tenemos más tiempo para hacerlo.

La inhalación será lo más rápida posible, siempre por la boca. 
La exhalación es algo más pausada y larga, asegurándose de que se expulsa todo el aire dentro del agua por la nariz.

Para coordinar la respiración con el resto del cuerpo debemos de seguir los siguientes pasos: 

1. La cabeza debe girar hacia el mismo lado que gira el cuerpo pero sin levantarse.
2. La boca sale a la superficie en el mismo momento que sale el codo para hacer el recobro. Esto sucede al mismo tiempo que el brazo contrario entra en el agua.  
3. El momento de máxima inhalación es cuando el hombro está en el punto más alto.
4. Mientras se inhala o coge aire, una mejilla, la oreja y un ojo han de estar en el agua.
5. Cuando el brazo va a entrar de nuevo en el agua, el cuerpo ha girado a la posición prona y por lo tanto su cabeza también.
6. La cara está dentro del agua en su totalidad y la vista mirando hacia delante.

Es recomendable aprender a respirar de forma bilateral para evitar desequilibrios en la alienación lateral ya que se girará el cuerpo a ambos lados, y además esto favorece la propulsión de las brazadas.